Inteligencia artificial (IA) y gestión de la integridad de los activos

La Inteligencia Artificial (IA) no es sólo una palabra de moda, sino que cambia las reglas del juego.

Imagine un mundo en el que las máquinas piensan y se anticipan a las necesidades y resuelven los problemas antes de que surjan. Ahora, piense en este poder aplicado a la gestión de activos, la columna vertebral de las industrias de todo el mundo. Aquí es donde la IA se une a la gestión de integridad de activos (AIM), ofreciendo una combinación de capacidades predictivas y conocimientos estratégicos que promete redefinir la forma en que protegemos y optimizamos nuestros activos.

Únase a nosotros para descubrir cómo la IA y la gestión de integridad de activos (AIM) trabajan juntas para mejorar la gestión de activos.

Para profundizar en los entresijos de este tema, hemos recurrido a la experiencia de Dan Jeavons, Vicepresidente de Ciencia Computacional e Innovación Digital y Director de Tecnología de Shell. Hemos reunido a Dan con el Director de Ingeniería de Cenosco, Josip Hrvatin, y con el Ingeniero de Soluciones, Luiz Curado, para profundizar en su amplia experiencia y conocimientos y ofrecer una comprensión profunda del viaje transformador de la IA en la gestión de activos.

La conversación ahondó en los retos que plantea la limitada accesibilidad de los datos, que obstaculiza la generalización de las aplicaciones de la IA e impulsa el imperativo de la digitalización. Siga leyendo para conocer los puntos de vista expuestos durante esta conversación, o haga clic aquí para ver el seminario web.

Shell emprendió su transformación digital hace una década con la creación de un Centro de Excelencia de Análisis Avanzado. En la actualidad, Shell cuenta con más de un centenar de aplicaciones de IA en producción, con un formidable equipo de más de 600 científicos de datos y más de 12 000 miembros en su red Shell.AI Network.

Con ello, Shell se sitúa a la vanguardia del aprovechamiento del potencial de la IA para optimizar las operaciones, asociándose con varias empresas, entre ellas Cenosco.

El crecimiento exponencial de los volúmenes de datos y las capacidades informáticas debido a la digitalización ha revolucionado lo que se puede conseguir, impulsando este auge de la innovación. A medida que los datos se hacen más abundantes y la capacidad de procesamiento sigue mejorando, Shell ha aprovechado la oportunidad de extraer perspectivas procesables de este caudal de información.

Estos conocimientos, basados en algoritmos de IA, han demostrado ser fundamentales para mejorar los procesos de toma de decisiones, predecir las necesidades de mantenimiento y optimizar el rendimiento de los activos.

El marco de madurez digital de Cenosco es un marco de orientación para las organizaciones que se adentran en la transformación digital. Avanzar a través de este modelo de madurez es un viaje gradual que requiere planificación estratégica e integración.

Las organizaciones que aspiran a alcanzar la fase "Estratégica Digital" deben reconocer la importancia de las soluciones integradas, aprovechando los datos y la IA para impulsar la innovación de forma eficaz. Solicite una demostración para obtener más información sobre este marco.

Cuando se trabaja con IA o con cualquier otra tecnología emergente, es crucial pensar en tener un propósito digital.

Lo que esto significa es que debe tener un propósito y unos objetivos alineados con su búsqueda, ya que las herramientas digitales permiten la innovación en lugar de ser fines en sí mismas. Conseguir la tecnología es sólo una parte del camino. Nuestro objetivo es que los activos sean más seguros y fiables, por lo que la integración de la IA en la gestión de activos es crucial.

Sin embargo, esta integración no implica una revisión completa de los procesos existentes, sino la adaptación y mejora de las prácticas actuales para aprovechar eficazmente el potencial de la IA. Aunque la IA no sustituirá a los inspectores ni a los ingenieros de corrosión en un futuro previsible, puede aumentar sus capacidades ofreciendo valiosas perspectivas derivadas de amplios conjuntos de datos y análisis predictivos.

Alinear la experiencia digital con un profundo conocimiento de los procesos de trabajo sólidos es primordial. La tecnología en sí misma no sustituirá a los procesos con los que trabajamos, sino que cambiará la forma de llevarlos a cabo.

Obtenga más información de primera mano en nuestro seminario web, en el que Dan Jeavons comparte un ejemplo de Shell, donde la utilización de la IA para la supervisión y optimización técnicas proactivas ha reportado beneficios tangibles, desde evitar problemas de fiabilidad hasta optimizar la producción y reducir las emisiones. 

La iniciativa Open AI Energy es un esfuerzo de colaboración dirigido por Shell y otros líderes del sector, como Microsoft, Baker Hughes y Cenosco. Utiliza soluciones de IA para los retos del sector energético.

Esta iniciativa estratégica pretende revolucionar las operaciones integrando a la perfección las tecnologías digitales y dando prioridad a los estándares de datos abiertos y a la interoperabilidad para fomentar la innovación. El énfasis radica en acabar con los silos de datos, destacando la accesibilidad y el potencial de colaboración del software de código abierto.

Cenosco ha participado activamente en tres importantes proyectos de la iniciativa Open AI Energy. Uno de estos proyectos, denominado AIR (Autonomous Integrity Recognition), utiliza drones para inspecciones remotas. Estos drones capturan imágenes que luego son analizadas por algoritmos de IA y aprendizaje automático para identificar problemas de integridad. La información obtenida de estos análisis se integra perfectamente en la plataforma IMS de Cenosco mediante nubes de puntos y modelos 3D.

Otra iniciativa, CARMA (Corrosion Advanced Risk Modelling and Analytics), se centra en predecir los índices de corrosión de diversos mecanismos de degradación. Aprovechando los datos de IMS, un sistema de IA correlaciona las mediciones del espesor de las paredes y el espesor de renovación con las condiciones del proceso para predecir con precisión los índices de corrosión.

El tercer proyecto es una síntesis de componentes clave de iniciativas anteriores -IRC, datos de cálculo de la corrosión e inspecciones sobre el terreno- para pronosticar la probabilidad de CUI (Corrosión Bajo Aislamiento). Esta amalgama promete un enfoque global para abordar los retos relacionados con la corrosión en el sector energético.

Estos proyectos subrayan la importancia de definir casos de uso claros y adaptar las soluciones para satisfacer necesidades cambiantes.

Estos proyectos sirven de trampolín hacia un futuro en el que los asistentes dotados de IA, a menudo denominados "ingenieros virtuales de la corrosión", desempeñen un papel fundamental en la revolución de las operaciones industriales. El objetivo es integrar la IA, los datos, el procesamiento del lenguaje natural (PLN) y los modelos basados en la física para permitir la toma de decisiones en tiempo real.

Al explorar el futuro de la IA dentro de la suite IMS, el optimismo es evidente, sobre todo con otra iniciativa de Cenosco centrada en integrar la experiencia de la inteligencia artificial en la empresa.

La colaboración de Cenosco con la Universidad croata de Pula ha dado lugar a la generación de numerosas aplicaciones potenciales, como la predicción de fugas, la programación automatizada, la generación de informes mediante comandos de voz y mucho más. Los conceptos de IA más prometedores se elegirán para su implementación, impulsando la innovación dentro de Cenosco. 

Al explorar el potencial de la IA en la limpieza de datos, nuestros expertos destacaron la capacidad de manejar datos heredados y optimizar procesos como los sistemas de venta de entradas. Existe una gran expectación por que las herramientas basadas en IA filtren eficazmente los datos históricos, mejorando así la síntesis y la eficiencia general.

Se hace eco de una visión similar sobre la evolución de la IA más allá del mantenimiento predictivo para revolucionar la gestión de datos. Se destaca la importancia de los datos estructurados en la gestión de la integridad, junto con la capacidad de la IA para extraer, resumir y organizar eficazmente la información no estructurada. Esta transformación promete desvelar información valiosa a partir de datos históricos, con importantes repercusiones en la seguridad y la fiabilidad.

A pesar de los retos, hay entusiasmo y expectación ante la perspectiva de la gestión de datos impulsada por la IA, que podría marcar una era transformadora en los procesos de gestión de activos.

Los datos seguirán desempeñando un papel fundamental en la configuración del futuro de la gestión de activos. Con la abundancia de sensores en los activos, los procesos están destinados a evolucionar, aprovechando la inteligencia artificial para agilizar las inspecciones y mejorar la eficiencia. Sin embargo, esto no significa el fin de los inspectores, sino un cambio en sus funciones para utilizar la IA como una herramienta valiosa.

Nos encontramos en la cúspide de una era transformadora en la que la tecnología desafía los paradigmas existentes y hace necesaria la colaboración entre empresas y personas. Asumir este cambio colectivamente es clave para liberar todo el potencial de la IA y lograr los resultados deseados. 

Si desea obtener más información sobre la IA en la gestión de la integridad de los activos, consulte el seminario web completo. Nuestros expertos ponentes tratan estos temas con más detalle.